Articulo 27

... de la Declaración Universal de los Derechos Humanos:

"Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resulten. Toda persona tiene derecho a la protección de los intereses morales y materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas, literarias o artísticas de que sea autora".

Este artículo viene impreso en una elegante 'bodoni' blanca y plateada, sobre fondo negro, que ha pasado a formar parte de todas esas pinceladas inconexas que pueblan las paredes de mi cuarto en forma de posters, fotos, postales y recortes de revistas. Desde que me instalé entre estas cuatro paredes, no he parado de añadir todo tipo de estúpidos y/o curiosos objetos a mi alrededor con el único fin de tener la sensación de llegar a 'casa', a mi espacio, cada noche después de trabajar. Al final he conseguido un caos que abraza hasta el punto de agobiar a cualquiera que se pase por aquí... pero a mí me gusta. En realidad, mi cuarto tiene y dice mucho de mí.

El caso es que el artículo 27 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que hasta ahora desconocía, ha pasado a formar parte de mi cuarto porque posiblemente es el mejor resumen de mi vida en Madrid. Desde que llegué, y sin saberlo, me lo he tomado al pie de la letra participando en la vida cultural de la Comunidad de Madrid y gozando de las artes que me ofrece... clá que sí. Me gustaría participar más como espectadora, pero sobre todo como creadora, pero actualmente no puede ser: mi creatividad brilla por su ausencia (si alguien la encuentra que me avise. No era muy brillante, pero ahora que ha desaparecido la echo en falta). Empiezo a pensar que pasar más de 8 horas rodeada de ineptitud va a acabar pasándome factura. Supongo que es el precio de la comodidad. Cada día, cuando me siento a las 10,30 en mi mesa a leer las noticias me siento como una estúpida burguesa/funcionaria acomodada en su silla, viendo las horas pasar y no dando crédito a las gilipolleces que acontecen a mi alrededor. Y si además le sumas que la televisión está encencida constantemente, llega un momento en el que mi cerebro no es capaz de depurar tanta basura. Debe de estar pudriéndose.

Últimamente las mayores chorrrradas de la televisión llegan de la mano de los políticos. Hoy en 'El hormiguero' se sorprendían porque unos 5 millones y medio de españoles están 'indecisos'. A mí lo sorprendente me parece que alguien pueda tenerlo claro, sobre todo teniendo en cuenta las mentiras que unos y otros sueltan cada día como órdagos. No quiero ni imaginarme lo triste que tiene que ser para unos padres que tu hijo te diga que quiere ser político. Tienen que haber hecho algo muy mal para que su hijo quiera dedicarse a la profesión más despiadada, sin escrúpulos y ruín que existe. Ah, y todo esto lo escribo el día de 'San Valentín', que aunque mi compañera de trabajo no se lo crea, sigo pensando que es el día en el que menos valor tienen las demostraciones de amor.

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* Escuchando: Elbow - 'Leaders of the free world'. Gran canción y gran descubrimiento de grupo.